Todos tenemos que lidiar con los nervios en estas situaciones, y las formas en que lo manejamos son variadas. Para mí, la mejor apuesta es realizar varias cosas:
- Es muy poco probable que reserve un proyecto dado; esto no tiene nada que ver con su talento, pero sí tiene que ver con variables que nunca conocerá. Por lo tanto, cada audición es solo otra audición, otra oportunidad de conocer gente e impresionarlos con su profesionalismo, otra oportunidad de hacer lo que le gusta hacer durante un par de minutos.
- Si puede permitirse disfrutar de la experiencia, es más probable que los directores / productores de casting disfruten de la experiencia y disfruten de estar cerca de usted.
- La mayoría de los conciertos están reservados porque alguien te conoció audicionando para algo que NO reservaste, y luego te recordó por algo más.
- Solo llegamos a manejar nuestro oficio con una audiencia. Esta es su audiencia, incluso si es solo una cámara colocada sobre una mesa. DISFRUTA teniendo la oportunidad de practicar tu oficio durante ese breve momento.
Tómatelo como un momento para disfrutar realmente haciendo lo que haces y darás una mejor audición 🙂